El Obispo de la ciudad de Mar del Plata, Gabriel Mestre, recibió al equipo de Resumen del Sur para conversar sobre los cinco años del Papa de Jorge Bergoglio. En ese marco, aseguró que “Francisco logró poner a la Iglesia a la calle” y remarcó los aspectos más importantes de su gestión en el Vaticano como así también algunos puntos que podrán marcar la agenda de 2018.

 

¿Cuál es su balance de estos cinco años de Francisco?

En continuidad con lo que se venía planteando con Juan Pablo II y Benedicto XVI, Francisco logró poner la Iglesia en la calle, como primera expresión, tal vez bien porteña como le gusta a Bergoglio. Poner la Iglesia en la calle con todo lo que eso significa. Reencontrarse con una realidad que en algunos ámbitos por ahí se daba, pero que tal vez no en la totalidad de la Iglesia. Y verlo al Papa hacer esto, incluso con algunos gestos particulares y líneas muy concretas, genera que tengamos que tomar estas posturas y este traer el mensaje de Cristo a las realidades concretas para no quedarnos en cuestiones etéreas o verdades que no tocan la realidad.

 

Francisco habla de la cultura del descarte, dice que este sistema no funciona y critica al “Capitalismo Salvaje” . ¿Cómo se toma eso?

Se toma de manera positiva. La expresión “Capitalismo Salvaje” es de Juan Pablo II, que venía de una reacción fuerte ante el tema del comunismo en Polonia. Bergoglio, que había tenido una tensión más fuerte por el lado de la extrema izquierda, de repente como Papa se planta en un pensamiento más de derecha liberal y claramente fustiga en una Encíclica que plantea las incompatibilidades con el capitalismo neoliberal. El Papa lo que hace es traer esta perspectiva de manera más llana, directa y clara criticando centros financieros emblemáticos como Estados Unidos. Lo plasma en un contacto directo con organizaciones populares de pensamiento católico y no católico, como algunas organizaciones de izquierda que no abrevan en el catolicismo, pero que participaron en Santa Cruz de la Sierra y Temuco. Esto marca que no tiene quedar en lo discursivo, sino que tiene que llegar a las bases en donde la persona, la familia y el trabajo digno son valores por encima del capital o la renta financiera. Él lo marca con claridad y gestos muy concretos y lo trae a la calle para que lo entiendan los especialistas en cuestiones financieras. Lo que quiere explicar es que la cultura del descarte afecta a los más vulnerables de la sociedad.

´Entre un académico y un buen párroco, elige al párroco que camina su barrio, su villa o su comunidad´ Click To Tweet

 

¿Es un Papa antisistema?

Yo creo que sí. Saltan algunos temas como el de los refugiados, donde entra en cortocircuito con la Unión Europea. No deja de haber pensadores y economistas que dicen ser católicos y cristianos que también lo han criticado mucho por sus opiniones. Lo cierto es que Francisco se inscribe en la mejor tradición católica que partiendo de la Biblia en el Antiguo Testamento con los profetas, pasando por Jesús y Pablo, siguiendo por los padres de la Iglesia en los primeros siglos de la vida de la fe y continuando por las líneas más genuinas a lo largo de tiempo, siente la persona y la familia y no la renta financiera. En definitiva cuando uno lee libros de San Juan Crisóstomo, San Basilio, ciertos textos de Amos en el antiguo testamento o algunas cosas de Jesús en el mismo evangelio, lo que vemos es que quien está en el centro es el ser humano. Poner al hombre en el centro y no a la economía es un valor evangélico que el Papa Francisco lo pone en el tapete.

 

Desde la dinámica interna de la Iglesia. ¿Cuál te parece que es el cambio más interesante?

El Papa ha optado en puestos claves y en colaboradores directos a sacerdotes, obispos, cardenales o laicos con perfil profundamente pastoral y comprometidos con la realidad. Es decir, entre un académico y un buen párroco, elige al párroco que camina su barrio, su villa o su comunidad y que conoce a los vecinos y atendió a las viejitas en la Parroquia. En todo lo que ha sido estructural en el vaticano y en la Iglesia universal ha priorizado este perfil.

Por otro lado,  en la reestructuración de la curia ha simplificado y promocionado otros que por ahí estaban más reducidos.

 

Hay dos temas sensibles para la Iglesia que son los casos de abusos y el rol del Vaticano con las dictaduras. ¿Cómo te parece que lo abordó Francisco?

Estoy convencido que en los casos de los abusos, Francisco lo asumió perfectamente bien en la línea que lo había asumido Benedicto en el final de su pontificado a raíz de lo que surgió en Estados Unidos, Irlanda y algunos otros países en donde se comprobó que eran ciertos. La realidad se vuelve compleja cuando muchas veces a nivel de justicia civil y canónica no sabes si realmente el cura acusado es realmente culpable.

Cuando vas avanzando ves casos que son lamentablemente ciertos y otros no. Es complejo cuando la situación queda media barrosa. En el caso de Barros, el Obispo de Osorno, el Papa se enojo, pidió pruebas y luego disculpas. Inmediatamente después mandó a un equipo encabezado por el Obispo de Malta que estuvo investigando este último mes pasado y próximamente habrá novedades que esperamos que arroje un poco de luz. Esencialmente el Papa se maneja bien en un tema tan complejo.

´Aprendimos que defender los Derechos Humanos es de carácter evangélico Click To Tweet

Respecto a la dictadura, el Papa tuvo una actitud positiva cuando en algún momento se lo quiso embarrar. A los sacerdotes que supuestamente él había mandado al muere, en realidad él trató de sacarlos para que no sean alcanzado por las dictaduras. No ha habido ningún elemento puntual e incluso han salido a defenderlo amigos que sufrieron de la dictadura. Después de los errores cometidos por algunas personas de Iglesia que justificaron lo injustificable, la Iglesia aprendió una gran lección y nosotros que somos la generación posterior aprendimos con claridad que el elemento esencial de defender los Derechos Humanos es de carácter evangélico. Entonces, el Papa tiene una postura clara y la Iglesia argentina lo aprendió a costa de errores. Francisco dio signos fuertes, por ejemplo, al recibir a Hebe de Bonafini que había dicho barbaridades de él. Entendió que Hebe es una mujer que perdió a sus hijos y en ese contexto la recibe.

´Me viene la fantasía de una visita de Francisco a China´ Click To Tweet

 

¿Qué lugar se le da a la geopolítica en la formación de la Iglesia?

Nosotros tenemos cuatro años de filosofía y cuatro de teológicas que están relacionadas con la realidad y todos estos temas aparecen. Tal vez puede ser que pequemos en la formación de los curas por prioziar cuestiones de carácter social más inmediato y perdemos de vista la cuestión global. En la formación de los líderes laicos estos temas están presentes porque se forman con documentos y las reflexiones de Francisco. Es decir, si el Papa recibe a la hija de Luther King te tenés que dar cuenta que hay que ser abierto en lo social o si el Papa tiene dialogó con referentes de diversos sectores tenes que sabes quienes son y en que contexto los recibe. Lo mismos si elige ir a Myanmar y Bangladesh, estás obligado a  saber qué es lo que está pasando en esos lugares.

 

Francisco fue clave como mediador en diferentes conflictos. ¿Qué creés que tiene por delante en lo que le quede de su papado?

Yo creo que dos cosas: la primera más genérica es continuar con la cultura del encuentro como contraposición de la cultura de descarte, esto que Pablo VI caracterizaba como la Civilización del Amor, una frase linda que hay que  llevarla a la tierra. Lo otro más particular, me viene la fantasía de una visita a China. Un tema complejo y difícil por la realidad de los dos Iglesias. Por un lado la Iglesia de las Catacumbas que se mantuvo fiel a la Santa Sede y fue perseguida por el régimen comunista y otra parte de la Iglesia que se suma al régimen y se convierte en oficial. Que el Papa pueda pisar suelo chino dado que como jesuita de joven tenía como sueño ser misionero en China. Si lo pudiera lograr, con todo lo que implica China a nivel geopolítico sería muy importante.